Lo Grotesco: Lo grotesco en el arte

Por Jonathan Isaí Solís López

Tachar de grotesco a una obra de arte es acusar a dicha obra de contener elementos que hasta ese momento se suponían irreales e inexistentes, algo que no debiera ser, pero que nos da una nueva e imprevisible forma de ver un aspecto de la realidad.

Muchas de las obras grotescas pueden ser con personas deformes o de muchas otras maneras, cuando una persona la ve le produce curiosidad e interés, haciéndose una serie de preguntas pues no entienden su significado ni por qué esa obra está en ese lugar.

Goya y Lucientes “Desastres de la guerra”

http://www.zeno.org/Kunstwerke/B/Goya+y+Lucientes,+Francisco+de%3A+Folge+der+%C2%BBDesastres+de+la+Guerra%C2%AB+%5B39%5D

“Es contundente cómo el arte en general ha buscado plasmar nuestra visión de la realidad, sea ésta física, psíquica o mítica, tras un perfil simbólico figurar cada uno de los posibles acercamientos del hombre en su devenir”[1]

El arte grotesco se concibe erróneamente como un planteamiento ante el receptor de características anormales, ilógicas, desagradables e irreales, para causar sentimientos de repulsión, cuando, de lo que se trata es de crearle una visión crítica frente a la realidad.

Un ejemplo estaria en las pinturas del Bosco, pues para poder entenderlo se requiere de un trascender en lo que nos presenta, como en su obra “el jardín de las delicias” podríamos decir que se trata de una locura, pero dejando a un lado nuestros juicios, podemos admirar una franqueza irracional dentro de un estado social del mundo.

El jardín de las delicias.

http://www.catplus.de/die-katze-in-der-kunst-a-f/hieronymus-bosch-um-1450-1616/.

“Lo fundamental en lo grotesco es la creación de monstruos, de naturalezas mixtas, híbridas, logradas mediante mezclas extravagantes de cosas que en sí mismas no tienen relación alguna, de elementos que provienen de campos totalmente diferentes. El mundo de lo grotesco es peculiar y se rige por normas estéticas peculiares, que nada tienen que ver con los cánones de la belleza, y que tienden a la degradación y a la parodia. En este mundo degradado y paródico, la figura animal se mezcla con la humana, lo vivo con lo inorgánico e inerte”[2]

Pero incluso, lo grotesco lo podemos encontrar en obras más antiguas de lo que nosotros creemos, pues no sólo lo encontramos en el renacimiento, sino que también lo podemos encontrar antes, en la antigua Grecia.

Un elemento sobresaliente en la cultura griega es su preponderancia sobre la belleza formas proporcionalmente perfectas, en muchos de los casos en postulados pitagóricos, y en algunas de las esculturas griegas se llega a percibir con sutileza lo grotesco que es mítico-religioso como en algunas figuras de terracota que produjeron, éstas eran formas desmesuradas de elementos habituales, como esclavos, campesinos o mujeres gordas.